Las industrias con mejores sueldos

Con la misma velocidad que se transforma el mercado, también aumenta la necesidad de profesionales que atiendan las nuevas tendencias laborales, por ejemplo, hace algunos años, la industria informática despegaba y abría la oportunidad a ingenieros en sistemas, hoy el contexto es distinto y por ello, resulta relevante mencionar las industrias que mejor pagan y los sectores que mueven la economía del país.

De acuerdo a la encuesta realizada el año pasado, por la compañía internacional y líder en capital humano Adecco, informa que existe una diferencia de la oferta laboral dependiendo de la región del país.

El mismo estudio también arrojó que en la Ciudad de México, la consultoría, es la industria con mejores sueldos. Con una posición de director administrativo ofrece un sueldo hasta $90,000 pesos al mes; la segunda industria con mayor salario es la de construcción, quien ofrece a un gerente de finanzas $65,00 pesos; le sigue la industria logística, que paga a un ingeniero de producto $60,000 pesos.

En el bajío, la industria de la construcción a nivel de jefe de compras y gerente de obra, ocupan las posiciones mejor pagadas; detrás se encuentra la industria automotriz (posiciones gerente de ventas o gerente contralor) y manufactura (gerente de ventas o gerente de calidad).

La zona noroeste del país muestra un panorama distinto, puesto que es la industria metalmecánica la de relevancia. La posición de gerente de planta oferta un sueldo de $70,000 pesos; posteriormente se encuentra el puesto de comprador senior y como tercero más lucrativo está la industria agropecuaria donde un gerente de producción alcanza un sueldo de $40,000 pesos.

En el noreste, la investigación informa que el sector de las tecnologías de información ocupa el primer lugar con la posición de desarrollador SAP, le sigue el automotriz (posición de gerente de producción o gerente de operaciones) y, al igual que en el bajío, la industria manufacturera ocupa el tercer sitio (posición de administrador de ventas).

En la zona de occidente, el sector automotriz tiene el sitio número uno con un sueldo de $50,000 pesos con el puesto de traductor, el segundo lo tiene la industria de alimentos, donde el gerente de operaciones o gerente regional de ventas llegan a obtener un salario de $45,000 pesos; en tercer lugar está la manufactura que brinda a un gerente de operaciones $40,000 pesos de remuneración.

Tanto la zona del sureste como la del bajío se comportan de una forma similar, comparten la industria de la construcción como sector líder, destacan la posición de gerente de finanzas o gerente de mantenimiento. También son similares en la industria automotriz (posición oficial de salud y de seguridad o gerente de logística), pero por sus recursos naturales, se identifica la industria petroquímica como tercera industria para sobresalir profesionalmente.

En este sentido, las empresas deben considerar que los futuros profesionistas buscarán emplearse en compañías, que además de ofrecerles una estabilidad económica, les permitan tener la oportunidad de desarrollarse personalmente fuera del trabajo, con el fin de lograr un alto nivel de desempeño tanto en lo personal como en lo laboral.

Situación actual del salario mínimo

Con la serie de eventos electorales, tanto nacionales como internacionales, y las imprecisiones de la participación de México en el Tratado de Libre Comercio, resulta en obviedad que el aumento al ingreso por remuneración de trabajo de los mexicanos, se haya visto afectado, dado que fue hasta diciembre del año pasado que el Consejo de Representantes de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami), hizo oficial el porcentaje de aumento salarial.

De acuerdo a datos obtenidos del Servicio de Administración Tributaria (SAT), en el 2017 el salario mínimo general aumentó 7 pesos llegando a $80.04 pesos; a diferencia del año 2016 que tenía un valor de $73.04 pesos, lo que equivale a $2.94 pesos más que en el 2015.

Especialistas del sector financiero han mencionado que el salario mínimo sigue perdiendo ante una creciente tasa de desempleo y una inflación que va “por las nubes” , suficientes razones para afectar directamente el nivel adquisitivo de los mexicanos, incluso para el pago de los productos y servicios más básicos; por lo que el ingreso es insuficiente para lograr el bienestar de un trabajador y su familia, y por estas razones, se plantea un aumento de mayor porcentaje para el siguiente año.